RINOPLASTIA: CIRUGÍA DE NARIZ
La importancia estética de la nariz es tan grande y su posición en la cara tan prominente que la rinoplastia es una intervención realizada con gran frecuencia sea por motivos estéticos como funcionales en casos de desviaciones nasales con mala respiración.
La rinoplastia o cirugía de la nariz es una intervención quirúrgica que implica los riesgos de todo acto médico aunque sean mínimos.
Antes de la intervención de rinoplastia:
Se practica un estudio preoperatorio y una completa historia clínica así como un estudio fotográfico. El cirujano plástico informa al futuro operado de las modificaciones que se propone realizar en la forma de su nariz en armonía con el diseño de su cara. A la hora de operar la nariz en ningún caso se utiliza un patrón único.
Intervención de rinoplastia:
Requiere una anestesia general o una anestesia local con sedación según la dificultad de la intervención y la mejor opinión del cirujano plástico en cada caso concreto. En el 95% de los casos utilizamos la técnica cerrada para evitar la cicatriz de la columela y porque es el procedimiento con el que nos sentimos cómodos teniendo en todo momento el control del aspecto de la nariz según avanza la intervención. En casos muy complejos traumáticos y/o con falta de tejidos utilizaríamos la técnica abierta. No utilizamos ultrasonidos pues el cincelado con escoplo nos permite modelar los huesos nasales a nuestro gusto sin tener que recurrir a una rinoplastia abierta por obligación técnica.
Después de la intervención en la nariz:
Se coloca un taponamiento nasal durante 48 horas (más si hay algún problema de tabique), así como una férula que inmoviliza la nariz durante 7-10 días. No debe causar inquietud la presencia de equímosis e hinchazón a la altura de los ojos, con frecuencia más acentuada en un lado que otro. La intensidad depende de la facilidad de cada persona para hacer «derrames» y hematomas.
Del séptimo al décimo día:
Se retira la férula pero el resultado final de la rinoplastia no se ha conseguido aún pues:
-
- La nariz está amazacotada.
- La punta aparece demasiado elevada.
- El aspecto puede sorprender por:
- De perfil: un relleno del ángulo nasofrontal que da un aspecto pasajero de «nariz griega».
- De frente: un alargamiento de la raiz nasal o un lado algo más hinchado que el otro.
Hacia el duodécimo día:
El operado está ya «presentable» y las señales de la intervención de rinoplastia han desaparecido aunque la nariz todavía está ligeramente hinchada, sobre todo la punta.
Al cabo de dos o tres meses:
Se puede tener una idea aproximada del resultado definitivo que no podrá ser evaluado convenientemente hasta que haya transcurrido un año de evolución.
Resultado de la rinoplastia:
Por lo general corresponde al plan fijado antes de la operación aunque siempre hay que tener en cuenta que trabajamos sobre tejidos vivos, la memoria de los mismos, la formación del callo óseo en el dorso y el efecto de la cicatrización. Unos milímetros en cualquier otra parte del cuerpo no se notan pero en la nariz si. En ciertos casos, es necesario practicar algunos retoques con anestesia local.